El congosto de Cajigar es un imponente desfiladero poco conocido a pesar de encontrarse cercano a la carretera. Este estrecho congosto cuenta con 2 km de longitud y 50 metros de desnivel, donde las oscuras galerías de sus tramos permanecen en total penumbra incluso con el sol en su zénit, por lo que también es llamado como “los oscuros de Cajigar”.
Su cauce es muy estrecho y excavado, donde se puede observar la majestuosidad del agua al erosionar sobre las rocas.
Para acceder a él en coche, antes de llegar a Tolva hay que coger la pista del Barranco Seco, y llegará un momento que veremos que se tiene que aparcar el coche. A partir de ahí se remonta el barranco.