Desde las 8,30, los organizadores habrán dado la bienvenida a los ganaderos participantes en este certamen que, como también es habitual en las últimas ediciones de la feria, recibirán una prima de la organización tanto por el ganado que se desplace con guía como por el que se venda durante la feria. El ayuntamiento destina a este apartado una subvención de 700 euros.


Habrá también degustación de tapeo por los establecimientos hoteleros de la localidad entre las 12 y las 14 horas y, complementando la oferta de la feria, los tenderetes –muy numerosos en los últimos años y cada vez más centrados en la oferta artesanal- ofrecerán una variopinta muestra de las más diversas mercancías.


Los organizadores esperan que la Feria se mueva en cifras similares a las de años anteriores. En pasadas ediciones el número de ganaderos expositores se ha movido en torno a la veintena mostrando en Castejón unas reses que en buena medida bajaban desde los pastos veraniegos en la montaña para su estabulación invernal y presentaban un formidable aspecto.


La feria de Castejón de Sos tiene su origen en el siglo XVI, durante el reinado de Felipe II, y ha sido desde entonces un referente económico en la Alta Ribagorza. No obstante, las grandes transformaciones socio-económicas de la segunda mitad del pasado siglo llevaron a su desaparición en la década de los sesenta y fue la decidida actuación del ayuntamiento de la villa la que garantizó su recuperación a comienzos de los ochenta. A partir de ese momento el certamen se ha consolidado como una atractiva propuesta que propicia el encuentro de las gentes de la zona poco antes de que el rigor invernal y las necesidades de la campaña turística de la nieve condicionen la vida en la zona.